Mensaje de Mary para el Sr. Pierre-Yves

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Mi hijo. Mi hijo Pierre-Yves. ¡¡¡Nunca dejes de creer!!!

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No os quiero en oración perpetua, sino en consideración a nuestro universo, así como a nuestro padre creador universal.

De todas las tareas que te podríamos dar, la de escucharnos y hablarnos, será, en un principio, perfecta.

En primer lugar, te quiero como un "aprendiz". Luego, en un segundo, tendrás que entregarte en cuerpo y alma a tus semejantes.

Tendrás que mostrarles nuestro viaje, así como su viaje a nuestro corazón celestial (fe) .

Así te queremos. Muy cerca de nuestro corazón celestial.

Sólo después, todo eso, os hablará y podremos así, respondernos... de corazón y cuerpo terrestre y celeste (el corazón) interpuesto.

Mientras tanto, tendrás que aprender y aprender de tu prójimo: Patrick Dorian. Porque solo él te puede aconsejar muy bien.

Y por nuestra parte, te prepararemos para escucharnos hablar contigo.

Y también te enseñaremos todo sobre nuestro universo celestial.

Así que, desde ahora en adelante siéntanse orgullosos de su andar terrenal y desde hoy pidan entrar en su corazón terrenal y celestial y les hablaremos continuamente.

No sólo nos escucharéis sino que además tendréis que aprender a recibirnos, en vuestro cuerpo celeste, así como aprender a hablarnos. Te amo y te enseño...

María, tu madre celestial te llevará, en su vientre materno, para mostrarte el rumbo que queda por ejecutar, para encontrarnos y así poder unirte a nosotros.

Y cuando te lo hayamos mostrado, este famoso camino, te lo pediremos prestado, para que podamos trabajar juntos.

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Marie.